Las compañías inteligentes tienen más de un líder empresarial. Esto, aunque pueda sonar raro, es así y en este breve artículo te lo queremos explicar.
¿Conoces a consciencia qué significa ser un líder de verdad? Un líder es alguien que consigue que otras personas escuchen lo que tiene para decir. Eso suena simple, ¿no? Otra manera de decirlo sería que un líder es alguien que logra que otras personas se sientan a gusto siguiendo sus instrucciones, recomendaciones e incluso mandatos.
El verdadero liderazgo combina varias habilidades interpersonales que no dominan todas las personas. De hecho, incluso aunque trabajen en desarrollarlas, alguno/as están mejor predispuestos para asumir posiciones de autoridad que otras.
Pero, ¡ojo! Esto no significa que todas las personas en puestos de autoridad sean líderes. Para nada. Es bastante frecuente que compañías y gobiernos tengan líderes inadecuados en puestos que no están hechos para ellos.
Un líder auténtico domina una serie de habilidades interpersonales que les facilitan el trayecto al hacerse escuchar.
Cuando el líder actúa en función de las necesidades de sus compañeros, sin dejar de lado el beneficio de la empresa, es porque sabe identificar pronto necesidades que tiene el equipo. Por eso debe ejercitar la comunicación constante y recíproca, y esto va de la mano con…
“El empleado y el jefe no deben relacionarse; cada uno debe saber y respetar su posición“. ¿Estás de acuerdo con esta frase? Date unos segundos, reflexiona y sigue leyendo.
Existe una creencia popular acerca del rol del jefe en una empresa. Se cree que es esta figura que ordena, comanda y logra que los demás ejecuten sin rechistar. Esta figura es respetada y quizá temida. La cuestión es que respeto y miedo nunca deben considerarse sinónimos.
Un jefe “ogro”, normalmente, es temido. El problema es que corre el riesgo de no ser respetado. Y cuando se trata de alguien increíblemente capaz y talentoso será respetado, sí, pero, ¿por qué no ser respetado, al mismo tiempo que visto como una figura amable y de confianza?
El mito del verdadero jefe de empresa se basa en la creencia dañina de que el jefe debe intimidar para para lograr verdadera disciplina. Nada más alejado de la realidad. Al menos, no es como debería ser en el entorno empresarial. De hecho, ¡este pensamiento está más ligado a la vida militar que a los negocios!
Pudimos observar las características clave de todo buen líder empresarial. Pero una que aún no tratamos y que es tan importante como cualquier otra es su capacidad para saber a quién delegar funciones y cómo eso fomenta la aparición de nuevos líderes en el equipo.
El buen líder es consciente de sus talentos, pero también de sus limitaciones. Conocer bien dónde se ubican estas fronteras es lo que le permite ejecutar tareas de la manera más eficiente la mayor parte del tiempo. Así, aquí entra en consideración cuándo es necesario que el líder cuente con ayuda muy vital.
Todas las empresas funcionan a diferentes niveles. Es decir, cada una tiene distintos departamentos encargados de tareas específicas. Por ejemplo, una distribuidora cuenta con un departamento de logística, uno de analítica, otro de distribución, otro de almacenamiento; y todos trabajan de manera conjunta siguiendo los lineamientos de la gerencia general.
No hay manera humana en que una sola persona se encargue de dirigir a plenitud todos y cada uno de los departamentos. Por eso, es trabajo de la herencia general delegar funciones.
El líder verdadero, como ya dijimos, tiene habilidades interpersonales muy importantes. Son esas habilidades las que le permiten identificar y reconocer a otras personas con esa capacidad innata para el liderazgo. En este sentido, la delegación de funciones va de la mano con la aparición de nuevos líderes.
Un individuo con cualidades para liderar es alguien asertivo, que sabe comunicarse con un tono de armonía y entrega buenos resultados laborales. Este es el tipo de persona que resulta buen/a candidato/a para asumir nuevas responsabilidades y ayudar a mantener funcionando cada departamento.
Si eres líder en tu equipo de trabajo, por favor toma en cuenta el encontrar a las personas adecuadas para asumir posiciones de liderazgo. Por otra parte, si se te dificulta hacer esto, los asesores empresariales pueden ayudarte a encontrar a la persona que reúna las características que estás buscando.
Un líder realmente capacitado para un puesto de gran responsabilidad es una figura equilibrada. Es alguien en la búsqueda constante del bienestar conjunto de la empresa y de sus miembros, y pondrá esto por encima de su beneficio único y solitario.
Un líder hará que otros le sigan por voluntad propia, pero además sabrá encontrar a otros con estas habilidades que lo ayuden en la gesta de hacer avanzar, juntos, a la empresa.
Ahora, pregúntate: ¿eres un verdadero líder empresarial? Y si es así, ¿a cuántos otros líderes potenciales tienes en tu empresa sin que aproveches al máximo sus capacidades?
